domingo, 4 de diciembre de 2011

Habia una vez una niña de 4 años, ella pensaba que lo mejor de la vida era crecer para tener mas libertad, todas las noches solo pensaba sobre el dia en el cual ella se hiciera una niña grande.
Ella crecio y ahi descubrio que la vida era facil cuando ella tenia 4 años, que ella desearia volver a ser pequeña otra vez, sin tener las obligaciones que tiene ahora, sin las preocupaciones que conlleva, sin los problemas que atrae, sin nada de lo que significa ''Ser grande''. Ella mira las fotografias y ve a una niña sonriendo sin dificultad y con la sonrisa mas real del mundo, ahora se mira al espejo y ve unos ojos caidos junto a una sonrisa totalmente falsa. Se preocupa de salir bien del colegio, de verse bien, de el muchacho que le gusta y el no la toma enserio, de aquel problema que tuvo con sus padres por llegar muy tarde despues de la hora acordada... en fin, siendo que a los 4 años el mayor problema era no querer comerse cierto alimento porque simplemente no le gustaba. Camina por las calles con un par de audifonos y musica como acompañante, vuelve a su casa y siente la soledad, se hunde en un pozo profundo de dolor y grita, pero nadie la logra escuchar. Llora y se lamenta sin saber escapar. Vuelve a su pasado cuando solo era una pequeña y recuerda que ella corria y corria por los amplios espacios del patio de su casa sin preocupacion, jugaba con sus mascotas, se subia a un arbol, luego bajaba y continuaba corriendo. Si se caia y lloraba, llegaba su madre o su padre a consolarla y a sanar su herida. Ahora ella sentia que sus sentimientos no importaban al resto.
Esa pequeña niña de 4 años ha crecido y en este preciso instante esta escribiendo esto.