viernes, 3 de diciembre de 2010


Quizás vine al mundo para esto: para saber que no soy nada, para sufrir, para sentirme sola todo el tiempo, para ser infeliz. La felicidad solo me llega por momentos, pero luego se va como si nunca hubiese estado aquí en mí, como si se escapara. El dolor que llevo dentro es tan grande que mi cuerpo explotaría si el dolor fuera sólido, necesito la cura para esto, algo que me cure completamente el dolor, no por momentos ni segundos, necesito que el dolor se valla por siempre y no vuelva, que desaparezca, que se queme, que se convierta en cenizas, que ya no queden sus restos. ¿La felicidad será una realidad o un mito?.